El oro blanco es una opción cada vez más popular en el mundo de la joyería debido a su brillo elegante y moderno. Sin embargo, no todos conocen los detalles de este material tan valorado. A continuación, te explicamos todo lo que necesitas saber sobre el oro blanco, desde su composición hasta su cuidado.

¿Qué es el oro blanco y cómo se obtiene?

El oro blanco es una aleación que se obtiene mezclando oro puro con otros metales, como paladio, plata o níquel, para darle su color característico. A diferencia del oro amarillo, que es más suave, el oro blanco es más resistente gracias a su composición.

En joyería, el oro blanco suele ser de 18 quilates (18k), lo que significa que contiene un 75% de oro puro y un 25% de otros metales. Este tipo de oro también suele estar recubierto con una capa de rodio para darle un acabado brillante y más duradero.

¿Cuál es el precio del oro blanco?

El precio del oro blanco varía según su quilataje y la cantidad de oro puro que contenga. El precio del oro blanco de 18k hoy depende del mercado internacional del oro, pero es similar al del oro amarillo de la misma pureza, ya que el valor está en el contenido de oro. Factores como el diseño y la marca también pueden influir en el precio final.

¿Cómo saber si una joya es de oro blanco o plata?

Para diferenciar una joya de oro blanco de una de plata, puedes buscar los sellos o marcas identificativas que indican la pureza del metal. El oro blanco de primera ley lleva marcas que indican su contenido de oro, como «750» para 18k. En cambio, las marcas de la plata suelen ser «925», lo que indica su pureza (92,5% plata). Además, la densidad del oro es mayor que la de la plata, lo que hace que las joyas de oro blanco sean más pesadas.

Cuidados para las joyas de oro blanco

Aunque es resistente, el oro blanco puede desgastarse con el tiempo, especialmente su recubrimiento de rodio. Si te preguntas si el oro blanco se pone feo, la respuesta es que puede perder brillo si no se cuida adecuadamente.

Para mantener tus joyas en perfecto estado, evita el contacto con productos químicos y guárdalas en lugares secos. Un pulido ocasional y un nuevo baño de rodio pueden devolverle su brillo original.

En José Roldán contamos con una colección completa de oro blanco, acorde con las exigencias del mercado. Solo tienes que contactarnos ahora…